Determinar la viabilidad de los requisitos

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Durante todo el proceso de recopilación de requisitos, debe asegurarse siempre de que los requisitos son factibles. A medida que realiza el análisis de lagunas de idoneidad y la revisión de cada uno de los requisitos, es un buen momento para comprobar una vez más la viabilidad. Cuando la información se capturó originalmente, probablemente no disponía de otros detalles que tal vez causen que un requisito sea menos factible. La determinación de que un requisito plantea desafíos de viabilidad debería conducir a una reevaluación realizada con ayuda de expertos en la materia o, posiblemente, a la reducción de la prioridad del requisito.

Determinar si los usuarios utilizarán la característica

Después de familiarizarse con los usuarios, debe considerar si el resultado del requisito será la creación de una característica que realmente van a usar. Por ejemplo, la característica podría ser un proceso automatizado que, por estar demasiado automatizado, provoca que mucho trabajo tenga que rehacerse en situaciones habituales. Otro caso puede ser una característica que, si bien resuelve el problema, lo hace con una solución extremadamente compleja.

Evaluar si la característica es técnicamente factible

La idea de que si no se pide algo, no se recibirá es cierta. Y esta idea también se aplica a los requisitos. Sin embargo, los usuarios a menudo imaginan y solicitan soluciones elaboradas para dar respuesta a sus desafíos. A medida que examina cada requisito, debe evaluar si la solicitud de solución de los usuarios se ajusta a las tecnologías de las que disponen actualmente. Además, debe evaluar si la solución que está creando es coherente con la forma en que la plataforma del cliente está diseñada para funcionar. También debe plantearse si está presionando más de lo razonable para aplacar las sofisticadas expectativas de sus clientes. Por ejemplo, si el volumen de solicitudes es alto, puede correr el riesgo de sobrepasar los límites de la API para proteger la plataforma; en este caso, por tanto, implementar la solución según lo planeado no sería factible.

Evaluar si el proceso es factible o si se ha obviado

A medida que revisa los requisitos, pueden poner claramente de manifiesto un proceso de negocio, como la resolución de nuevos casos o un proceso de ventas. Tener una visión clara es excelente en el caso de los procesos para los que solo debe comprobar si son razonables e implementables o no lo son. Sin embargo, debe asegurarse de haber cubierto las excepciones que se producen con frecuencia. También pueden suceder que 10 requisitos no hayan identificado individualmente un proceso y que luego, mientras los evalúa en su conjunto, un proceso de negocio sea más identificable inesperadamente.

Comprobar si las normas y leyes reguladoras causan que un requisito no sea factible

Si está trabajando en un sector regulado, asegúrese de comprobar los requisitos con un experto que sepa qué está permitido y qué no está permitido. Al recopilar ideas, es
fácil entusiasmarse con un requisito y más tarde darse cuenta de que el requisito no es factible porque entra en conflicto con una norma o ley reguladora.

Una vez que ha terminado de recopilar los requisitos, es el momento perfecto para reflexionar sobre el conjunto completo de requisitos y asegurarse de que son factibles; puede hacerlo durante el análisis de lagunas de idoneidad o el diseño de la solución a partir de los requisitos.